Esta vez de modo más llamativo, la nueva ley antitabaco divide a los españoles. Para los que somos no fumadores es una gran ventaja, especialmente para los que son empleados de la hostelería.
Estos días contemplamos como se debaten los fumadores, rabiosos, cumplidores otros,... ante esta nueva norma.
Efectivamente es una gran pena que se haya tenido que llegar a este punto, pues en muchas ocasiones eran los fumadores los que no supieron ser respetuosos con los no fumadores: fumando menos, saliéndose fuera a fumar, etc.
Solo dejo algunos aspectos que me extrañan:
- ¿Esta es una norma o un bote de humo para que los ciudadanos desvíen su atención de problemas mucho mas acuciantes?
- ¿Qué explicación tiene que se "catalogue" a los fumadores como delincuentes mientras otras acciones mucho más perjudiciales para la sociedad se toleran (véase especialmente respeto a la vida al inicio y final)?
- Ahorraremos en gasto sanitario. Estupendo, nos hace falta. ¿Renunciaremos de una vez por todas a la recaudación de impuestos de algo que no nos conviene?